martes, 22 de abril de 2008

Viajes: Melo.

El texto a continuación va a formar parte en un futuro no muy lejano, a una serie de artículos destinados a datar y detallar, las experiencias recogidas en los viajes por el interior del país.
Estos viajes se encuentran enmarcados dentro del proyecto "Sodre Aquí", que tiene como finalidad principal lograr la descentralización de la música "clásica", es decir , romper con la clásica estructura de centralización capitalina, e intentar expandirla hacia el interior del país. De esa forma la idea es poder brindar a cualquier ciudadano de cualquier parte del país, la opción a poder estudiar música "clásica" (pongo entre comillas la palabra "clásica" , porque en sí estoy en desacuerdo con la terminología, pero es la única forma de hacer entender al tipo de música al cual me refiero).
Muy bien, una vez aclarado un poco el proyecto a muy grosso modo, voy a pasar a lo que importa: El viaje a Melo....
La jornada en Melo se llevó a cabo en dos días: Viernes 18 y Sábado 19. En cierta manera este texto va a ser un poco inconcluso, porque solo pude asistir a la jornada del día sábado.
Bueno, ahora rompo un poco la formalidad de la presentación y paso a describir lo que fue mi experiencia personal, ya que mi idea principal , es hacer un diario de viaje.


La salida

El ómnibus salía para Melo a las doce y media de la noche. Como siempre llegué a último momento, no sé por qué siempre me pasa lo mismo. en fin, entre corridas llego justo a tiempo a la terminal con mi viola , un bolso, y un tapper con fideos que me habían dado Guillermo y Cecilia, que de por cierto hago un pausa porque me salvaron la vida con esos fideos, jeje... ahora sí.. hablando en serio... mis agradecimientos por la amabilidad de Guille y Cecilia....
Subo al ómnibus.
Por suerte me toca ventana, me pongo para escuchar una ensalada que tengo de Caetano Veloso, Tribalistas, Gene Vincent y Chico Buarque. Me como los fideos que estaban muy ricos, se ve que le pusieron los cubitos con gustos de Knorr que están buenísimos....
La idea de viajar y conocer siempre fue algo que me fascinó, me parece una experiencia increíble y sobre todo de un toque muy íntimo. el viajar solo, me hace pensar que es intentar encontrarse a uno mismo (es medio banal, pero hay algo de eso), y más cuando ese viaje se hace a lugares que uno no conoce, entonces la sensación crece más, el desplazarse sin saber bien a que lugar irá a parar...
En fin... Prosigo...
A eso de las seis de la mañana llego a Melo. No hay nada más interesante que llegar a un lugar desconocido en la madrugada, porque es como que el lugar se le aparece a uno "desnudo", está abandonado, al descubierto, y uno puede de forma inmediata meterse en él. Más si sumamos la luna llena que había, el cielo muy despejado y el frío de la noche, digamos que todo era propicio para la llegada a un lugar desconocido.
Me compré un refresco, pregunté en donde quedaba el lugar a donde me tenía que dirigir y me largué caminando. Obviamente me habían dicho que cuando llegara me tomara un taxi, pero las ganas de caminar por la ciudad desierta ganaron por lejos...
llegué al lugar.
Llegué y lo primero y único que hice fue tirarme a dormir un rato. Lo único malo de viajar es que la cabeza me queda más abombada de lo que es...

Good Morning!!!!

Creo que me despertaron para desayunar a eso de las nueve.
Me dirijo hacia el comedor y veo una mesa larga con muchas personas sentadas. Como imaginan dormí apenas dos horas y media, así que mi cabeza ahora sí que entendía menos que menos. Fue muy cómico. Me empezaron a decir donde estaban las cosas para desayunar, y sinceramente, nunca me había pasado de no entender nada de nada, jaja... parecía que estaba en un estado alucinógeno...
Por fin medio me desperté y pude desayunar...

ahora pasemos a lo que verdaderamente me interesa...


Actividades

las actividades comenzaron en la mañana a eso de las once.... la idea era que cada persona que había tenía que optar momentáneamente por un instrumento...
Antes hago un pequeño paréntesis para hablar de las personas que habían en el encuentro, me parece que es muy importante nombrarlas, ya que fue muy grato haberlas conocido.
Ellos son: Pablo 1 "Pastorius" ( de Melo) , le pongo Pastorius porque lo que más hicimos fue hablar y hablar de Jaco Pastorius y Charles Mingus....
Pablo 2.... ( el otro Pablo) también de Melo si no me equivoco...
Cristina.... (de Melo también creo)
Señoras docentes de Treinta y tres, lo siento , pero no me supe el nombre de ninguna...
Florencia de Piriápolis, a la cual agradezco por su ayuda con palmas y su colaboración con el violín, y de paso aprovecho para felicitarla por su actuación en el concierto de la noche.
Y ...
las muchachas de Minas, que sinceramente me quedé muy contento con la buena onda, y las verdaderas ganas de querer hacer las cosas...
Ellas son: Romina ( que ya quedó copada con la viola), Melisa (que a pesar de decir que era impaciente tocó muy bien), y Lucía Herrera y Lucía X (no me acuerdo el apellido), que aunque en la jornada de trabajo no estuvieron conmigo (porque se avivaron y eligieron otros instrumentos), fue muy lindo luego charlar con ellas y compartir las ganas por la música...
Bueno, bueno...
Esta nota se extendió mucho, y eso que yo últimamente no escribo tanto...
Entonces para ir acortando dejo algunas fotos de la jornada... y alguna de la previa al concierto...

Lugar en donde se desarrollaba la jornada: en primer plano Jorge Risi, responsable del proyecto "Sodre Aquí"



Cristina, Franco, Melisa, Florencia y Romina





Melisa (lo que se ve de rosado), Romina y Franco




Vivianne, minutos antes de entrar en acción al escenario

1 comentario:

Fabián Muniz dijo...

Realmente espero que te vaya muy bien con esto. pareces muy entusiasmado y eso me pone feliz...
Bue... basta de sentimentalismo barato, jeje
Abrazo y nos estamos viendo cualquier día
Fabián.